No se si les ha pasado en este tiempo, pero siempre había algo que me frenaba de poder encontrar un tiempo para Dios (muy mal hecho), pero siempre había una excusa para no hacer lo que tenía que hacer.
Con esto quiero llegar a que te replantees si realmente estás prestando atención a lo que Dios está hablándote ahora o si estás poniendo excusas para no pasar tiempo con Dios y haciendo oídos sordos.
¿Qué es lo que te frena? ¿Cómo lo solucionarías?
Espero sus comentarios.